Residuos de envases

Los envases ligeros forman parte de nuestra vida cotidiana.

Botellas y envoltorios de plástico, latas de comida y bebida y briks son envases de composición y tipología muy diferente aunque comparten alguna característica en común.

Una de ellas es que pesan muy poco para el volumen que ocupan.

Otra es que cuando ya no sirven para cumplir la función para la que se fabricaron, los materiales de los que están hechos siguen teniendo valor.

La forma en la que los ciudadanos podemos ayudar a recuperar el valor de estos envases es participando en los programas de recogida selectiva.

En algunos lugares funciona, para cierto tipo de envases, el sistema de depósito, devolución y retorno. En este sistema, a cada envase se otorga un valor económico que el consumidor deposita en el momento de la adquisición de un producto. cuando el consumidor devuelve el envase se le retorna la cantidad que depositó por el mismo.

El sistema empleado en la Comunidad de Madrid para recuperar los envases es a través del contenedor amarillo.

La separación y reciclaje de envases permite reducir:

  • el consumo de materias primas, energía y agua.
  • las a emisiones de CO2 a la atmósfera.
  • la cantidad de residuos que acabarían en el vertedero.

 

  • Tira los envases completamente vacíos
  • Aplástalos en la medida de lo posible
  • Separa los tapones de las botellas